A pesar del paro Nacional que azotaba a la Argentina el día 25 de Septiembre, Cannibal Corpse & Napalm Death brillaron ante un Vorterix colmado. La crónica aquí:
Fotografía gentileza de Laura Acuña. Todos los derechos reservados.
El evento de metal más brutal del año en Argentina, se llevó a cabo en el Teatro Vorterix el pasado 25 de Septiembre. Una vez más Cuero y Metal estuvo presente en dicho acontecimiento que a continuación te narramos:
La llegada de los norteamericanos Cannibal Corpse junto a los ingleses Napalm Death movieron multitudes de tal manera que colmaron el teatro en un día complicado para nuestro país donde todos los medios de transporte estuvieron parados incluyendo los vuelos. Aun así la fecha se mantuvo en pie y tanto las bandas como el público demostraron fervor, fanatismo y compromiso por esta música que tanto amamos como lo es el Metal.
Napalm Death dio el comienzo con un show más que brutal como nos tiene acostumbrados. El tema introductorio “Multinational corporations” empalmó con “Instinct of survival” para demoler con una seguidilla de canciones pertenecientes a uno de sus mejores trabajos discográficos bajo el nombre de “Scum”. Entre ellas estaba “Control”, “Life?” y su tema de menor duración “You suffer” de 3 segundos de extensión, seguido de la canción “Dead” de una duración de 6 segundos, así presenciando algo que solo veremos en el mundo del Metal, dos canciones interpretadas en un lapso de 10 segundos. Este último tema pertenece al disco “From enslavement to obliteration” del cual también interpretaron las canciones “Practice what you preach” y “Unchallenged hate”.
Una de sus canciones más conocidas “When all is said done” fue la causante de armar uno de los mosh pit más brutales de la noche. Otros temas como “Smash a single digit”, Cesspits”, “How the years condemn”, “The wolf I feed”, “Standardization” y “Everyday pox” atravesaron las épocas de sus grandes discos “Apex predator – Easy meat” y “Utilitarian”.
La banda pionera del Grindcore también presentó covers. En esta ocasión interpretó “Victims of a bomb raid” del grupo “Anti Crimex”.
Su mayor clásico “Suffer the children” retumbó sobre los muros del teatro. Le siguieron clásicos como “Narcoleptic”, “Breed to breath” y “Silence is deafening”. Este último perteneciente al disco “The code is red… long live the code”.
Antes de su próximo cover, el vocalista del grupo Mark “Barney” se solidarizó con la situación a nivel país, haciendo referencia al paro y el apoyo a los trabajadores interpretando el tema anti-fascista “Nazi punks fuck off” del famoso grupo “Dead Kennedys”.
El show concluyó con su último golpe a los dientes “Inside the torn apart” que agotó las energías de un público poguero quienes alentaron hasta donde alcanzó el cuerpo. Pero la masacre no terminó ahí. Faltaba uno de los grupos más emblemáticos y brutales del Death Metal a nivel mundial, Cannibal Corpse, quienes dieron otro show extremo y alucinante.
Fotografía gentileza de Laura Acuña. Todos los derechos reservados.
Presentaron su trabajo discográfico más reciente titulado “Red before black” del cual interpretaron “Code of the slashers”, “Corpus delicti”, “Only one will die”, “Red before black” y “Scavenger consuming death”.
A partir de ese momento interpretaron canciones que representaron a casi cada uno de sus discos, atravesando todas las etapas de la banda. Un setlist muy variado del cuál sobresalieron “Scourge of iron”, “The wretched spawn”, “Pounded into dust”, “Kill or become”, “Gutted”, “Devoured by vermin”, “A skull full of maggots”, “I cum blood” y la más sobresaliente “Evisceration plague”. Cada una de ellas con su propia esencia remarcando cada temática perteneciente a cada disco, pero con la similitud de la densidad y la brutalidad musicalmente hablando sobre el escenario, con un George Fisher que expulsaba su Growl más podrido y se deleitaba con su headbanging tan particular. Aun así y más allá de la brutalidad también se demostró virtuosismo por parte de cada músico, demostrando que hasta en la canción más grotesca se podría agregar solos de guitarra, cortes de batería, cambio de tempo y toda la atmósfera necesaria para montar un show de Metal inigualable.
El público respondió de la mejor manera, saltando, pogueando y coreando cada canción. Pero el momento más demoledor fue sobre el final cuando la banda interpretó sus grandes clásicos “Make them suffer”, “Stripped, raped and strangled” y “Hammer smashed face” el cual fue literalmente un martillazo en la cara.
CRONICA: Luis Ignacio Pucheta de CUERO Y METAL // FOTOGRAFÍAS: Laura Acuña (visita su fanpage haciendo CLICK AQUÍ)